Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades

Se dotará de una cantidad adicional para atender nuevas necesidades de personas mayores que se encuentren solas, sin apoyo familiar y sin compañía durante periodos de tiempo prolongado, que se detecten a raíz del trabajo realizado en las llamadas durante la crisis sanitaria, ofreciéndoles este servicio de acompañamiento para fomentar la autonomía, favoreciendo sus relaciones con el entorno y evitando situaciones de soledad.

Se creará un fondo para dar respuesta a todas aquellas personas mayores que requieran de un alojamiento alternativo, solicitando el ingreso en una vivienda comunitaria o en otro recurso habitacional que se valores por parte del Servicio Social de base como un recurso adecuado para prevenir su situación de aislamiento y de tránsito hacia la dependencia.

Se creará un fondo de colaboración con otras instituciones para poder garantizar a las personas sin hogar el acceso a un alojamiento temporal con manutención incluida que posibilite a las administraciones competentes la generación de recursos sociales específicos adecuados a la diversidad de perfiles diagnosticados a raíz de la situación de confinamiento con el coronavirus. Este fondo permitirá además apoyar a los alojamientos de la ciudad (albergues, hostales y pensiones) a afrontar la bajada de reservas que se van a producir a raíz del coronavirus al menos durante 2020.

Reforzar y adecuar, si fuera necesario, los programas existentes para detectar y atender las situaciones de desprotección y de conflictos intrafamiliares agravadas por el confinamiento y que requirieses de una intervención psicosocial o socioeducativa.

Mantener el porcentaje de ayudas aprobado a la Cooperación al Desarrollo para 2020, atendiendo a la nueva previsión presupuestaria.